martes, 8 de octubre de 2013

Ida y vuelta





Cómo ruge el destino,

ese que sembraste palmo a palmo de vientos.

Berreas tu cobranza que no desentona,

pero igual estoy triste.

¡Lo que pudo haber sido tu vida, jilguero,

mi chambón sin conciencia, sin virtud, sin apego!

Se cayó el escenario

como se desmoronan redonditos los sueños:

sólo en un parpadeo,

y me duele el reembolso que te hace la plaza,

¡pero te fue tan cómoda y durante tanto tiempo!

¿Diré que es injusto?

Me anuda la garganta

tu mano extendida al vacío de un ciego. 




lunes, 16 de septiembre de 2013

Equilibrista




Decidió subir 
por un rayito de sol
-nadie lo detuvo-
Resbaló de hoja en hoja 
por el jazmín de algún jardín.
¡Qué suculento!
Fue entonces que se quedó
en el ángulo más lúcido de la tarde
y desde allí     
(y con los ojos tapados)
coloreó sin pretexto el horizonte 
hasta intuir
una calzada para pájaros.




lunes, 2 de septiembre de 2013

Correr, morir, volar




Corría en la floresta
presuroso,
vencido de ansiedades
ancestrales,
gritando que hallaría
de los vientos
el punto diligente
donde nacen.

Moría en cada paso
continente
unido a las raíces
del abismo,
arando bestia y tierra,
percibiendo
el mundo como a un ser
quemado vivo.

Voló. Con su mirada
desatada
del fiero pavimento
y sus rizomas,
nombrando al dulce Lirio
de los Valles
el dueño y hacedor
de la victoria.

jueves, 1 de agosto de 2013

Espasmos





Perdidos entre páginas de historia
(no hay escapatoria),
de tapa a contratapa acorralados,
de margen a vertientes confinados
(y a carne entregados),
los hombres, ¿se pelean por la gloria?

Y sin embargo llega a ser notoria
la estúpida euforia
que a cuenta de sus actos desmañados
pretende bautizar como angelados  
perniles enervados
que sirven para dar nombre a la escoria.

¿No es náusea lo que el alma en el reflejo
de sí misma en las aguas a que aspira
concibe cuando mira?
En eso el animal es muy distinto.

Si al hombre lo que toca en esta gira
es sólo lo que cabe en el pellejo,
ya basta de festejo;
no hay gloria en conducirse en el instinto.



miércoles, 26 de junio de 2013

Papelitos





Circulen, circulen, no ha pasado nada.
Sólo que la luna hoy está luciendo,
generosa y libre, una carcajada.
Fresno, paraíso y un tilo vecinos
logran la vereda mejor perfumada.
Vivaz una niña va danzando en giros,
sujetando el mundo con una mirada.
Y un acordeonista callejero, anciano,
vibra desde el alma su mejor balada.
Pero ustedes sigan en sus ajetreos:
pasos apretados, cabeza agachada,
juntando papeles para vacaciones.
Circulen, circulen, no ha pasado nada.



lunes, 17 de junio de 2013

No se puede amar sin ser un santo










No se puede amar sin ser un santo
porque el amor tiene eso que ennoblece
dándose al otro, pues se compadece
y anhela verlo bien por todo encanto.  


Habrás ido más allá del espanto
-¿y quién podrá negar que eso enaltece?-
cuando al sentir el frío que estremece
te enardezca el amor a ser un manto
.

Mas, de estas cosas, ¿quién es suficiente?
¿Se puede ser amor y ser humano,
ser débil, egoísta, libertino?


Asomará el amor, esa simiente
que te hace ver al otro tan cercano,
si en el humano nace lo divino.




jueves, 6 de junio de 2013

Otra orilla



Edén atrasa
el gesto amplio de la despedida.

Sin medida,
crece el fa menor de una palabra dulce

hasta quebrar el cántaro
que celaba la última y más añeja lágrima. 

Amanecida y cubierta de mohínes, 
se desborda una nueva canción.





lunes, 13 de mayo de 2013

Cómo puede haber sol








Cómo puede haber sol…

si tus palabras no están para encenderlo.

Es mentira que la brisa baila airosa entre los árboles.

Y no creo en los colores de esa loca mariposa ,

díscola provocadora,

ignorante de mi cuerpo sin tu abrazo.

Como un niño eludiendo sus tareas escolares,

me saltaré esta mañana de mayo

y abriré los ojos cuando escuche tu voz.



viernes, 3 de mayo de 2013

Liturgia para uno de estos días






Sobre los huesos de tu índole

moldearé el semblante de tu arcilla

y lo maquillaré con un ocre prudente.

En cada repaso lo iré cubriendo con celo

de las joyas más amables de tu andanza.

Luego inhumaré tu recuerdo,

en posición encogida,

rodeado de tus armas y tus gestos cotidianos.

-Lo haré lejos de mi mente,

debajo de una choza que se cree alma-

Pondré con él

cinco guardianes y un lirista que intimiden a la finitud.

Y si alguien alguna vez

hallare el ideograma con que habré sellado

esa recóndita esfera,

no podrá descifrarlo.

Amor,  ¿cómo podría?






jueves, 25 de abril de 2013

Referido







Había en un país desconocido
un ente en formación desesperado.
De inerte material era rodeado
el cual no sabía él que era su nido.


-¿Por qué a nada de aquí soy parecido?
¿Por qué nada se mueve ni me ha hablado?
¿Será que en el olvido fui enterrado?
¿Seré un mal, un horror bien omitido?


Sin referente alguno se encontraba,
pero eso no duró muchos segundos:
la madre, con comida, ya llegaba.


La escudriñó con un mirar profundo.
Hermoso, le dijo ella, se llamaba
y él se sintió feliz en este mundo.









viernes, 19 de abril de 2013

Vengo, vida











Me ha marcado la vida,
me ha escrito las espaldas.
Con sus diez mandamientos
me ha enlodado las faldas.
Sin embargo esperaba
como un niño inocente
de su savia preciosa
ese beso en la frente.
Sin embargo corría
al encuentro de ella
cual caricia anhelada
que no espera querella.
Me has marcado, oh, vida.
No has pedido disculpas.
Soy efigie que vengo
a pedirte que esculpas
corazón apropiado
que ligero me lleve,
grácil como gacela,
por este mundo breve.










miércoles, 10 de abril de 2013

Nuestra tarde



Sentirte así:
Mi aire
Médula que me expande
Sentirme así:
Tu sangre
Río desgajado que te abre
Profesarte
Este amor desobediente
Recibirte
Ese amor ingobernable
Concebir un orbe, dos cubiertos
-Ternura para dos y alarde-
Y solfear a tornapunta
La verde melodía de la tarde.







A buena edad








Habitado por sombras en desuso
torpemente deambula el inquilino
de ese sector oscuro del destino
que el consumo de años le dispuso.

No es éste el jubileo que él supuso,
de placer y descanso vespertino:
a sus seres queridos le es cansino
y en cualquier escondrijo es un intruso.

¡Qué triste la abstinencia de ternura
que siguen los que adora desde críos!
¿Habrá para ese mal alguna cura?

Ovillando ausencias y vacíos
esta tarde lastima mientras dura
y el abuelo gasta sus pocos bríos.



lunes, 11 de marzo de 2013

Te vi




Ayer te vi

en una arruga arbolada

con veredas amarillas.

Ayer te vi escondido

entre dos palpitares 

de mi corazón ajeno. 

Ayer, sin más, te vi,

y el collage 

-tan prolijito y pertinente que era-

se desbarrancó papel abajo.



sábado, 9 de febrero de 2013

Largá







Yo sé quién sos, tristeza.

Te reconocí apenas doblaste la esquina.

Y sé de dónde venís….

De recorrer todo lo que pudo haber sido y no fue,

de contemplar el espectáculo de lo que no se puede cambiar,

de agitar el aire que ya fue respirado.

Te vengo diciendo: ¡ya te vas a ir…!

Mientras tanto andás por ahí,

haciéndome la pasadita,

y yo te miro pero no me dejo,

te miro pero no te toco.

No te hagas, tristeza,

te reconocí 

a pesar del sol en lo inconcluso de tus ojos.